El domingo pasado, 22 de septiembre de 2024, falleció a los noventa años de edad uno de los grandes intelectuales marxistas de nuestro tiempo: Fredric Jameson. A modo de homenaje hacia su persona y su valiosa obra, queremos compartir con ustedes esta sustanciosa entrevista que le hiciera en 2014 Ramón del Castillo para la Fundación Juan March, cuando Jameson visitó España. Asimismo, el domingo próximo publicaremos un obituario biográfico-intelectual del filósofo y crítico literario y cultural estadounidense, donde ahondaremos en su trayectoria teórico-crítica. Sí queremos mencionar aquí algunos datos generales sobre su vida y obra.
Jameson nació en Cleveland, Ohio, en 1934. Estudió en la Universidad de Yale, donde se doctoró con una tesis sobre la obra de Jean-Paul Sartre. Había estudiado en Francia y Alemania, lo que le permitió leer a los autores franceses y alemanes de su época en su lengua original. En 1961 publicó su tesis doctoral, con el título “Sartre: los orígenes de un estilo”. Ejerció la docencia en diversas universidades estadounidenses (Harvard, de California en San Diego, Yale, de California en Santa Cruz y Duke) como profesor de literatura francesa y literatura comparada. Entre 1960 y 1970 publicó artículos sobre diversos temas: literatura occidental, estudios culturales y filosofía. En 1971 adquirió notoriedad con “Marxismo y forma”, donde escribió sobre marxistas alemanes contemporáneos (Adorno, Benjamin, Marcuse, Bloch y Lukács) y también sobre Sartre. Un año después, salió a la luz “La casa-prisión del lenguaje”, donde se ocupa del estructuralismo francés y del formalismo ruso. En 1984 publicó en New Left Review el artículo “Posmodernismo, o la lógica cultural del capitalismo tardío”, que luego tomará forma de libro en 1991, y que es su obra más conocida. Allí propone una periodización cultural tripartita: realismo, modernismo y posmodernismo, ligada al esquema de Mandel de las tres fases del capitalismo: capitalismo de mercado, fase de monopolio o imperialista (Lenin) y fase del capital transnacional o financiero (también llamado “capitalismo tardío”), y analiza las características del posmodernismo en la cultura. Publicó un gran número de ensayos sobre variados tópicos, muchos en la tradición de la crítica cultural: sobre cine de Hollywood, series de televisión, arquitectura y urbanismo. Pero también sobre ideología y dialéctica, sobre el placer y la utopía, sobre el teatro de Bertolt Brecht. Comentó la Fenomenología del espíritu de Hegel y El capital de Marx, y sostuvo discusiones teóricas con Lyotard, Lacan y Weber, entre muchos otros. En fin, fue un autor prolífico y de una gran profundidad intelectual y crítica.
En esta entrevista realizada en Madrid el 9 de diciembre de 2014, el filósofo y crítico literario repasa su recorrido intelectual. El hecho de que Ramón del Castillo (doctor en filosofía con trabajos publicados en el área de los estudios culturales y la filosofía política) conozca profundamente la obra del entrevistado, contribuye en gran medida a hacer de esta charla un testimonio muy valioso y un aporte fecundo para comprender mejor la obra del autor norteamericano. Esta suerte de autobiografía intelectual –así fue titulada, de hecho, la entrevista– comienza con dos importantes tradiciones, en gran medida enfrentadas, que se combinan en el pensamiento de Jameson de una manera novedosa: la francesa (la filosofía de Sartre, pero también el estructuralismo y el posestructuralismo) y el pensamiento dialéctico alemán (Hegel y el marxismo). Por un lado, el “descubrimiento estructuralista de las oposiciones” estaría íntimamente relacionado con el “uso dialéctico de las oposiciones”; por el otro, “cada lenguaje filosófico tiene una cierta zona de claridad y de distinción”. Por lo tanto, “estas dos tradiciones tienen mucho que decirse la una a la otra”. Se declara como “profundamente sartreano”, aunque ya no siga usando ese lenguaje. También resultan muy interesantes las justificaciones esbozadas sobre el uso combinado de una perspectiva histórica y otra formal de análisis de los textos, o del paso de la fenomenología husserliana a la semiótica. Como argumenta, no se trataría en su caso de un mero eclecticismo en la fusión de teorías que parecen contrarias, sino del fruto de una necesidad inmanente de transitar de una a la otra, ya sea para analizar distintos aspectos de un mismo objeto de estudio, ya sea para estudiarlos en mayor profundidad: la descripción fenomenológica de la “experiencia vivida” se conectaría con el objetivo semiótico de “encontrar lenguajes para traducir con mayor precisión lo que pasa en la experiencia”. También se explaya sobre su interés en la historia, la ideología y la literatura entendida como “la articulación y expresión de la ideología”. Pero es la narrativa lo que tienen en común todos sus objetos de interés: no sólo la literatura, sino también la historiografía, que consiste en “convertir la materia bruta de los acontecimientos en narrativa”, y también el cine y “quizás otras formas del arte”. Es lo que sucede con sus análisis arquitectónicos, al reinterpretar las trayectorias de Le Corbusier en términos narrativos, y tal vez también la música. Como corolario, nos ofrece una explicación sumamente didáctica de su uso del cuadrado de Hjelmslev y sus conceptos de “forma”, “contenido”, “contenido de la forma” y “forma del contenido”, y una aclaración sobre la distinción entre “afectos” y “emociones”, que echan luz sobre su ya citado ensayo acerca del posmodernismo.
Desde Kalewche, creemos que la obra de Fredric Jameson constituye un aporte sumamente valioso al pensamiento marxista en los campos de la crítica literaria y cultural, sobre todo sus agudos análisis del posmodernismo. Sus investigaciones de la esfera cultural nos recuerdan cuán ligada se encuentra ésta a transformaciones estructurales, y nos permiten comprender mejor los cambios en los que nos vemos envueltos: cómo el desarrollo del capitalismo financiero afecta a la producción cultural, pero también a nuestras emociones y nuestra relación con el tiempo, el espacio y la historia. Es por todas estas razones que decidimos compartir con ustedes la entrevista que encontrarán más abajo.
Nicolás Torre Giménez